Rafael used to come from Los Angeles to the Park twice a month to see his family. His wife and his 5 daughters would come from Ensenada, B.C. They used to share laughs, gifts, concerns, and a lot of hugs. Those were the days that families could spend time together both physically and emotionally. Since 2009 Rafael could not come to the Park anymore and he has lost not just physical contact with his family but he has lost them emotionally. He hopes this does not happen to more families.
Rafael solía venir de Los Ángeles a visitar a su familia en el área del Parque y en la playa 2 veces al mes. Su esposa y sus 5 hijas venían desde Ensenada, B.C. Compartían sonrisas, regalos, preocupaciones, y muchos abrazos. Aquellos días eran cuando las familias podían pasar tiempo juntos física y emocionalmente. Desde el 2009 Rafael no pudo acercarse mas al Parque y el ha perdido la oportunidad de tener contacto físico con su familia y de esta manera el contacto emocional se ha ido desvaneciendo. Rafael desea que esto que él ha vivido no les pase a más familias.